Luis Motes, director y fundador de Doyou Media, ha cerrado el foro sobre el valor de los intangibles en el ámbito de la empresa organizado por la firma de servicios tributarios Tomarial. Motes ha dado su visión sobre la estrategia de comunicación para atribuir su verdadero valor a los los intangibles de la empresa y ha definido los que, a su parecer, serán los retos de marcas, empresas e instituciones en el campo de la reputación en 2023. El responsable de Doyou defiende que la proyección de una marca debe estar alineada con sus valores y su realidad, huyendo del relato falso o lo que ha llamado «pueblo Potemkin» de la comunicación, para poder ser efectiva y generar valor. Ante la atomización de las audiencias y la multiplicación de canales, Luis Motes recomienda que los hechos empresariales se sitúen como epicentro de los mensajes para huir de un relato vacío. La escucha, la monitorización y la omnicanalidad han de ser ejes de la comunicación empresarial, necesariamente adaptada a la realidad digital que vivimos.
Valorizar los intangibles es una asignatura pendiente para la gran mayoría de empresas españolas. Falta concienciación y formación para proteger unos activos que pueden rentabilizarse y que permiten la diferenciación de las compañías. Estas fueron las principales conclusiones de la jornada organizada por Tomarial Abogados, Economistas y Consultores en colaboración con el despacho Ballester IP y la agencia de comunicación Doyou Media. Bajo el título “Claves para proteger la innovación y potenciar los activos intangibles de la empresa”, se han abordado las medidas para proteger la propiedad industrial, la optimización fiscal de la inversión en I+D+i y la estrategia comunicativa para poner en valor estos activos.
El socio director de Tomarial, Antonio Ballester, ha expuesto la necesidad de que los empresarios acometan una estrategia sobre sus intangibles para que aporten todo su valor potencial a las compañías: “Deben actuar para identificar sus intangibles, cuantificarlos, protegerlos y optimizarlos fiscalmente. Un reciente estudio de EUIPO y OCDE valora que el impacto de la vulneración de la propiedad industrial en las pymes es enorme: por este motivo tienen un 34% menos de posibilidades de sobrevivir en un plazo de 5 años.”
Rosalía Ballester, socia directora del despacho especializado en propiedad industrial Ballester IP, lamenta “la poca concienciación de las empresas españolas respecto a la protección de la propiedad industrial y la marca. Las empresas que cuidan sus activos intangibles ganan un 68% más y es algo que en otros países los empresarios tienen como una prioridad”. Lucas Flores, abogado del mismo despacho, ha destacado que las empresas que siguieron invirtiendo en I+D+i “superaron mejor la crisis de la COVID” y es algo que en la Comunidad Valenciana debería potenciarse más, ya que algunos de los sectores más afectados por la infracción de derechos de propiedad industrial tienen un gran peso aquí: la fabricación de productos plásticos, productos químicos, automoción y azulejo.
Esta jornada sobre protección de los intangibles, celebrada en la sede de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), ha incidido en las fórmulas de protección de la propiedad industrial. Algunas tan poco conocidas y explotadas como el secreto empresarial, una alternativa a la patente que en algunos casos puede ser muy adecuada para preservar un amplio espectro de innovaciones y por un tiempo ilimitado.
El socio de Tomarial Tomás Vázquez Lépinette ha expuesto la nueva realidad legislativa que afecta a las start ups y ha destacado la necesidad de asesoramiento para que los proyectos de emprendimiento sean sólidos desde el inicio y puedan desarrollarse convenientemente. Para detallar la optimización fiscal de la inversión en innovación, también ha intervenido Miguel Ángel Molina, socio de Tomarial, quien ha detallado las posibles deducciones que afectan al I+D+i empresarial.